Nº Personas: 6 Dificultad: Media Calorías: 180 Tiempo: 40 min
5 yemas de huevo
8 cucharadas de azúcar
3 o 4 cucharaditas de harina de maíz refinada
1 litro de leche
La piel de un limónUna ramita de canela
PREPARACIÓN:
Apartamos 1/2 vaso de leche y le agregamos la harina de maíz refinada, y reservamos.
Mientras tanto vamos preparando el resto de la mezcla, cogemos los huevos y echamos las yemas en un bol (las claras las guardamos para otra ocasión). Cogemos el azúcar, y lo echamos en el bol con las yemas de huevo, mezclamos bien hasta que quede una masa homogénea.
Cuando la leche ya esté hirviendo bajamos el fuego. Echamos un poco de leche en la mezcla y removemos bien hasta que quede líquido, y después añadimos el resto, poniendo un colador para retirar la canela y la piel de limón. También añadimos la mezcla que teniamos al principio de harina de maíz refinada y leche.
Después echamos toda la mezcla en el cazo y lo dejamos a fuego lento, sin parar de remover, hasta que quede espeso. Debemos tener cuidado de que en este punto no llegue a hervir, ya que si no se nos cuajarian las yemas, y se cortaría, si vemos que llega al punto de ebullición apartamos, dejamos un poco y volvemos a poner al fuego lento.
En el momento en que el grado de espesor nos parezca el adecuado retiramos del fuego, repartimos en cazuelitas individuales y dejamos enfriar; una vez fria la metemos en la nevera.
Hay que tener en cuenta en dejar un pequeño margen ya que al enfriarse la crema espesará por sí sola.
Cuando vayamos a servir, podemos echar un poco de azúcar y quemarlo con un quemador, pero va en gustos.
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